Enfrentaré “autoritarismo” político y nuclear de China y Rusia: Biden

El presidente de Estados Unidos Joe Biden y su vicepresidenta, Kamala Harris acudieron al Departamento de Estado para mostrar que el gobierno considera la diplomacia como una prioridad y para elaborar en un discurso los ejes de su política exterior.

El demócrata pidió hoy la liberación "inmediata y sin condiciones" del principal opositor ruso, Alexei Navalny, encarcelado desde el pasado 17 de enero. "Nos preocupa mucho, a nosotros y a toda la comunidad internacional", expresó.

También manifestó su voluntad de enfrentar el "autoritarismo" de China y Rusia. Estados Unidos debe "estar ahí frente al avance del autoritarismo, en particular las crecientes ambiciones de China y el deseo de Rusia de debilitar nuestra democracia". "No dudaremos en aumentar la presión sobre Rusia y defender nuestro interés vital y nuestro pueblo", indicó. 

Biden dijo que ambas potencias se acostumbraron a tratar con un Donald Trump irreverente, pero que eso ha cambiado.

El presidente de Estados Unidos también puso fin este jueves al apoyo a la coalición encabezada por Arabia Saudita en la guerra en Yemen y congeló el retiro de tropas de Alemania, en tanto que afirmó que Washington no va a "someterse" más a Rusia, en una ruptura con la diplomacia de Donald Trump.

El fin del respaldo de Estados Unidos a la coalición militar liderada por Arabia Saudita que lucha en Yemen contra los rebeldes hutíes revierte la política de Trump de brindar asistencia logística y vender enormes cantidades de armamento. "Esta guerra debe acabar", dijo Biden.

Los hutíes celebraron este cambio, que fue anunciado más temprano por el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y afirmaron que esperan que sea "el primer paso de una decisión para poner fin a la guerra".

El plan revisará también la inclusión de los hutíes en la lista negra de "organizaciones terroristas" de Estados Unidos, otra medida tomada in extremis por el gobierno de Trump, pero criticada ampliamente por amenazar la entrega de ayuda a Yemen.

"Estados Unidos está de vuelta. La diplomacia está de vuelta", afirmó el mandatario demócrata.

Cumpliendo con otra promesa de campaña, anunció que la cuota anual de refugiados admitidos bajo el programa de reasentamiento pasará de 15.000 a 125.000.