Moody's, una empresa especializada en datos, inteligencia y herramientas analíticas para apoyar a líderes empresariales y financieros en la toma de decisiones informadas, modificó la perspectiva de la calificación de la deuda soberana de México, cambiándola de estable a negativa
La decisión de cambiar esta calificación, según la propia empresa, se debe a preocupaciones sobre el debilitamiento del marco institucional y de formulación de políticas, lo que podría afectar los resultados fiscales y económicos del país. Moody 's estima que el déficit fiscal alcanzará un 6% del producto interno bruto (PIB) este año, y considera quer la capacidad del nuevo gobierno para reducirlo está limitada por una estructura de gastos cada vez más rígida y una base de ingresos reducida.
La reforma al poder judicial, recientemente aprobada, también fue un factor importante en esta evaluación, puesto que, Moody 's advirtió que esta reforma podría erosionar los controles y equilibrios del sistema judicial, lo que tendría un impacto negativo en la fortaleza económica y fiscal de México. La empresa señaló que el deterioro en la asequibilidad de la deuda y la rigidez del gasto público dificultan la consolidación fiscal, especialmente tras el aumento de déficit este año.
La Secretaría de Hacienda argumentó que Moody's realizó su análisis sin contar con información completa sobre el presupuesto de egresos y la política fiscal para 2025, que se presentará al congreso el día de mañana. Hacienda sostuvo que una evaluación más detallada podría haber influido en la perspectiva de Moody's
Moody 's también destacó que existe un riesgo creciente relacionado con los pasivos contingentes de Petróleos Mexicanos (Pemex), cuya situación financiera es preocupante. La posibilidad de que el nuevo gobierno absorba la deuda de Pemex podría aumentar aún más los riesgos fiscales para el país.
A pesar de estos desafíos, Moody 's reafirmó que el perfil crediticio de México sigue beneficiándose de su sólida fortaleza económica, apoyada por la diversidad del mercado y las oportunidades derivadas del nearshoring. La agencia también mencionó que los desequilibrios macroeconómicos son moderados gracias a políticas fiscales y monetarias prudentes.
La Secretaría de Hacienda enfatizó que las nuevas inversiones en México, impulsadas por la relocalización empresarial debido a tensiones comerciales globales, ofrecen un potencial considerable para el crecimiento económico