La Sala de Situación para la Prevención y Promoción Permanente de la Salud de la Universidad de Guadalajara, aseguró que pese a que en Jalisco se han detectado cinco casos de viruela del mono, el riesgo de contagio sigue siendo bajo, esto debido a que para adquirir el virus se debe tener un contacto estrecho, ya sea directamente con lesiones dérmicas, fluidos corporales o superficie contaminada, detalló el Dr. Juan Carlos Lona Reyes, infectólogo pediatra del Hospital Civil Dr. Juan I. Menchaca.
"En relación a la transmisión por gotas, sí puede haber transmisión por secreciones respiratorias, sin embargo se requiere que el contacto sea estrecho, por ejemplo viajes internacionales que pueden durar muchas horas, hasta el momento, no se ha detectado la presencia de brotes, pero aún así en personas que están infectadas se recomienda el uso de cubrebocas y mantenerse aislados".
Señaló que hasta el momento tampoco hay estudios suficientes que avalen que la transmisión se pueda dar por contacto sexual. Añadió que como medidas de prevención, se recomienda evitar el contacto con superficies o material contaminado, el lavado constante de manos y mantener a las personas enfermas aisladas.
El periodo de incubación del virus es de 7 a 14 días y los síntomas pueden comenzar a aparecer después de 1 a 3 días. La enfermedad suele durar de 2 a 4 semanas y se caracteriza por la aparición de erupciones en la cara y diferentes partes del cuerpo, detalló el DR. José Ángel Regla Nava, Profesor Investigador del CUCS. "Los primeros síntomas son la presencia de fiebre, agotamiento, escalofríos, sarpullido, dolor muscular, dolor de espalda, cefalea y una característica muy marcada es la inflamación de los ganglios linfáticos".
La viruela símica es una enfermedad zoonótica descubierta en 1958. En 1970 se reportó el primer caso en humanos en la República Democrática del Congo, donde se han concentrado la mayoría de infecciones. Actualmente en el país, se tienen nueve casos confirmados, de los cuales 5 son de Jalisco y 4 en la Ciudad de México.
Hasta el momento no se ha registrado ninguna muerte asociada a este virus, actualmente no existe un tratamiento específico aprobado para la viruela y aunque se cuenta con vacunas, estas no se encuentran disponibles para la población general y su aplicación deberá valorarse en el futuro conforme la aparición de más casos.