Vecinos y comerciantes de la colonia Miramar en Zapopan que se vieron afectados y perdieron parte de su patrimonio hace casi un año con el desbordamiento del Arroyo Seco, siguen padeciendo por las inundaciones.
Aunque han hecho adecuaciones a sus negocios y casas con el levantamiento de barreras de ladrillo, y a pesar de que se han realizado algunas obras en los alrededores, ayer por ejemplo, nuevamente el nivel del agua alcanzó una altura de más de medio metro sobre la avenida de Guadalupe, a la altura de las calles Brisas Marinas y Costa Chica.
Quienes viven en la zona culpan a la falta de bocas de tormenta y al paso de camiones, que provocan que el agua ingrese. "Ya no se ha desbordado lo que viene siendo el canal pero si nos sigue afectando lo que viene siendo la boca de tormenta que tenemos aquí porque el ducto que tiene para que se vayan las aguas pluviales es muy pequeño, entonces no alcanza a abastecer para que se alcance a ir toda el agua" comentó Óscar Guizar, comerciante se la zona.
"Lo que nos afecta mucho y no lo entienden, pasan camiones, pasan carros, la oleada es lo que nos brinca (...) es por eso que tenemos este muro, porque con las oleadas se nos mete", señaló Martha.
Ante esta situación, algunos negocios han incluso optado por bajar sus cortinas. Un caso es el de Don Eduardo, quien vende extinguidores; debido a que trabaja con equipos y material delicado, prefirió cerrar temporalmente. "Ahorita no lo hemos abierto porque el polvo que se usa es muy delicado y ese polvo con la humedad imagínese. Se inundó hace poco, se metió lodo y todo, por eso pusimos la barda y se echó a perder el producto" compartió.
Debido a las inundaciones ocurridas en julio de 2021 en al menos siete colonias, entre ellas Miramar, más de 400 casas resultaron con afectaciones