Por primera vez, una institución de educación superior recibió nueve ejemplares de Meleagris gallopavo mexicana, mejor conocido como guajolote norteño, derivado de los esfuerzos de la Universidad de la Sierra (Unisierra), a través de la División de Ciencias Biológicas, para mantener el equilibrio del ecosistema característico de la región.
La universidad informó que el proyecto de conservación se desarrolla en coordinación con el Consejo Consultivo Técnico de la Vida Silvestre del Estado de Sonora, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Recursos Hidráulicos, Pesca y Acuacultura (Sagarhpa), la Asociación de Ganaderos Diversificados y Criadores de Fauna del Estado de Sonora (Agades) y el Aviario Sonorense.
Mediante el establecimiento de una Unidad de Manejo para la Conservación de la Vida Silvestre (UMA) para esa especie, se pretende contrarrestar la disminución de ejemplares a causa de la explotación forestal, por el impacto de las actividades humanas y porque es muy susceptible a contraer enfermedades.
La Unisierra explicó que los hábitats del guajolote norteño, especie de gran importancia cinegética, varían en diferentes partes del continente: desde bosques de pino y encino hasta pastizales de zonas áridas, así como bosques de mezquite y palo fierro hasta matorrales espinosos.
Asimismo, refrendó el compromiso de contribuir a la conservación del ecosistema en general, mediante acciones de protección de la biodiversidad que caracteriza a la región serrana sonorense.