Con dos hijas pequeñas y un feliz matrimonio de siete años, Amparo es una joven mamá tradicional quien eligió con cariño realizar todos los días de su vida el trabajo más pesado que toda mujer puede realizar, ser ama de casa para cuidar de su hermosa familia. Es una labor diaria que se hace con amor para el cuidado de los suyos, donde no hay horarios fijos, ni semana de vacaciones, ni beneficios económicos, pero sí una gran recompensa en el corazón
" En Ocasiones Si Es Fácil Pero Hay Días Que Es Un Poco Más Complicado Más Cuando Tienes Bebés Pequeños Que Los Tienes Que Atender Cambiar Pañales Viveros Y Hacer Las Cosas De La Casa Pero Es Bonito Y Gratificante Con El Paso De Los Años" comentó Amparo Quijas.
Sus días inician desde las 5:30 de la mañana, el arreglar a su pequeña que va la primaria, alistar mochila, uniforme, hacer desayuno y también a su esposo, quien se va trabajar; la labor empieza en la limpieza de la casa, hacer la comida, días de lavar ropa, arreglar detalles en casa, los quehaceres del hogar qué son interminables "Me Levanto Temprano Porque Tengo Una Niña De 6 Años Va A La Primaria La Alisto Para Ir A La Escuela Y Después De Que La Niña Y Esposo Se Van Me Dedicó A La Niña Pequeña Y Me Pongo A Hacer Algunas Cosas De La Casa Ya Veces Si Me Da Tiempo De Alistarme".