En su mayoría las unidades de transporte urbano ya apagaron sus aires acondicionados y solo
algunas anunciaron desde la semana pasada en las mismas unidades, que el 30 de septiembre sería
el último día que ofrecerían el servicio con el autobús refrigerado, ante esto los usuarios señalan que
todavía las temperaturas son altas y deberían esperar a que mejore el clima. Desde primera hora
circularon con las ventanas abiertas para mitigar el calor que afecta sobre todo en horas pico al ir
llena la unidad.