El Observatorio Sonora por la Seguridad reportó que 9 de las 24 víctimas de feminicidio recientes fueron asesinadas con armas de fuego, lo que resalta un grave problema de acceso fácil a armamento y la letalidad de estos crímenes. El uso de armas de fuego en feminicidios dificulta la defensa de las víctimas y limita sus posibilidades de sobrevivir. Este fenómeno subraya la necesidad urgente de fortalecer las políticas de control de armas y mejorar las medidas de protección para las mujeres, con el fin de prevenir la violencia de género y garantizar su seguridad.