Un aumento del 3% en el tránsito de migrantes se ha visto comparado con el mes anterior, por tres meses han recorrido México con hambre, dolor, vejaciones y pérdidas que se refleja en sus miradas cuando alguien se acerca a brindarle ayuda para hacerles más liviana su carga.
Lamentablemente con el número de migrantes ha crecido también el número de abusos por parte de elementos de la Guardia Nacional y del Instituto Nacional de Migración, hechos que han sido presenciados por los encargados ministerio externo de la Casa Franciscana, quienes acuden a la zona donde se resguardan tras bajar del tren para entregarles, alimentos, ropa y medicinas.
El padre Martín Ibarra, director de la casa Franciscana, hace un llamado al presidente de la república para que intervenga y evitar que el maltrato de quienes ya por sí solos sufren, continúe en las diferentes paradas que tienen en su mayoría sudamericanos en su recorrido por el país.