Este jueves 4 de octubre, la corporación policiaca municipal se vistió de temor y de luto, 5 elementos caídos fue el saldo de un ataque armado del que poco se sabe de fondo pero que generó un dolor e indignación en la sociedad.
Y es así como ahora se recuerda a los fallecidos, como parte de la sociedad, como seres humanos, hijos, padres, amigos.
Las primera expresiones de pesar se vertieron en redes sociales por Abraham García Coronado, elemento de tránsito ubicado en la Avenida Serdán y Calle 14, iba desarmado para dar confianza a los pequeños del jardín de niños Beethoven y la primaria Loreto Encinas, gustaba de la música y cada que tenía oportunidad se reunía con sus amigos para tocar, luego de 25 años en la corporación le hizo la señal de alto al vehículo de quienes habían atacado a sus compañeros minutos antes y cayó abatido, haciendo su trabajo hasta el último minuto.
Pedro Corral, de solo 27 años de edad fue otra muerte que caló hasta el alma, las imágenes de sus compañeros que trataban de reanimarlo rogando que no se fuera mientras yacía en el suelo hicieron mellas hasta en el corazón más duro, sus amigos agradecieron su presencia siempre, las llamadas solo para saludar, bromista, alegre, trabajador, humilde y un padre amoroso.
Ex compañeros de Marlon Dueñas Islas lo recordaron como un elemento activo y con mucha energía mientras compartieron el compromiso de servir a su país en la Infantería de Marina en el 2002, antes de integrarse a la policía municipal de Guaymas.
Para Enrique Alamillo Moreno solo hubo palabras de cariño, tenía la personalidad de padre protector para con sus amigos y compañeros, y fueron ellos quienes recordaron el último mensaje que recibieron de él, los consejos en la academía de policía, los buenos deseos a sus ex compañeros, altamente serio y responsable en su trabajo, podía parecer hostil mientras realizaba su trabajo pues su compromiso dentro del grupo operativo se lo exigía.
Dulce Rojo Nava, la más joven del equipo comandado por Francisco Peña Orendain herido también en el ataque, recordada gratamente por su intervención en un parto de emergencia en Ciudad Obregón cuando formaba parte de la policía estatal de seguridad pública, donde ayudó a una madre a dar a luz, su vocación de servicio saltaba a luz desde entonces y hasta el final este fatídico 4 de octubre.