A pesar de los esfuerzos por erradicar la venta de comida chatarra en las escuelas, esta práctica sigue vigente en muchas instituciones educativas de Guaymas. El profesor Jorge Ley Perea, director de la escuela primaria Álvaro Obregón, señaló que, aunque ya se tiene en cuenta la nueva legislación sobre este tema, la venta de productos como papitas, sodas, jugos, galletas y panecillos continúa en las cooperativas escolares.
El director reconoció que, además de la venta en las cooperativas, el problema también proviene de los padres de familia, quienes envían a sus hijos con lonches que incluyen este tipo de alimentos poco saludables. Ley Perea expresó su preocupación, al señalar que en su escuela hay niños con serios problemas de salud relacionados con la obesidad, algunos de los cuales llegan a pesar más de 90 kg.
EL IMPACTO DE LA ALIMENTACIÓN
"Es alarmante esta situación", comentó el director. "El impacto de estos hábitos alimenticios está afectando la salud de los estudiantes y contribuyendo a un aumento en los casos de obesidad infantil y enfermedades asociadas, como la diabetes". señaló el director Ley Perea.
Para abordar este problema, se han propuesto medidas que entrarán en vigor a partir de 2025, las cuales incluyen la eliminación de los productos chatarra de las cooperativas escolares. Estas acciones tienen como objetivo promover hábitos alimenticios más saludables entre los niños y prevenir enfermedades como la diabetes infantil.
Sin embargo, este problema no se limita a la primaria Álvaro Obregón, sino que afecta a muchas otras escuelas en la localidad, donde la venta de comida chatarra sigue siendo una práctica común. La comunidad educativa y los padres de familia deberán trabajar juntos para garantizar que los niños cuenten con una alimentación más balanceada y saludable.