La ausencia de Eduardo es el dolor más grande de Asunción, el día que falleció una parte de ella se fue con el que siempre será su niño, desde su nacimiento tuvo que luchar contra un padecimiento congénito que afectaba sus pulmones, siendo un paro respiratorio el que acabara con su vida no sin antes haber cosechado grandes amigos y mucho amor en el corazón de los que él también amó.
Este día celebramos en México el día de todos los santos y la noche en que los angelitos regresan a casa como marca la tradición, para Asunción, Eduardo nunca se fue, ella lo siente cerca y a pesar de que quisiera abrazarlo y escucharlo, la conforta saber que está en presencia de Dios pues él creía en esa promesa y que ahí se reunirá con su mamá que no deja de extrañarlo pero vive con la esperanza de volverlo a ver y estar juntos para la eternidad.