Tumbas vandalizadas, otras en mal estado por el tiempo y una soledad ajena a la tradición de este día es la que se vio en el Panteón San Fernando, familias lamentan la desatención que se le hado al cementerio y que al llegar se encuentren con que faltan desde crucifijos, inscripciones, hasta la reja y bancas que con esfuerzo habían colocado en el sepulcro de sus familiares y ellos no son los únicos, los amantes de lo ajeno han encontrado una mina de oro en los panteones.
El panteón lucía desolado comparado con otros años, ya sea por haber visitado el fin de semana, o por temor a que pudieran presentarse aglomeraciones y es que el también conocido como panteón viejo cada vez es menos visitado, muchos restos han sido exhumados y trasladados al panteón héroes civiles y algunas tumbas son tan antiguas que ya no quedan familiares, lo que ha provocado el olvido, incluso de las autoridades.