Durante más de dos generaciones en la familia de Valeria se ha mantenido la tradición de preparar capirotada para vender durante la cuaresma, desde que era una niña se interesó en su elaboración y participaba, Valeria cada viernes se levanta con mucho entusiasmo a preparar todo lo necesario para su elaboración
Son más de 35 litros los que Valeria con el apoyo de su mamá preparan cada viernes para vender, la mayoría de sus clientes la conocieron por recomendación de sus mismos consumidores, ella le da el crédito de la popularidad de su capirotada a que la hace con amor y como si fuera para consumo de su familia.