Desde el 2003, cada 10 de septiembre, la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio y la
Organización Mundial de la Salud promocionan el Día Mundial de la Prevención del suicidio.
En los últimos años la mortalidad por suicidio ha sido superior a la mortalidad total causada por
guerra y homicidios combinados es decir más de 800 mil personas, lo que significa que muere una
persona cada 40 segundos por esta causa, en México, de 2012 a 2017, el número de suicidios
aumentó en un 15% (de 5,550 a 6,370 casos, dados mayormente en la población masculina), entre
los temas más relacionados al suicidio se han detectado: la falta de oportunidades, las adicciones y la
exposición a la violencia y al estrés.
En México, en la última década han aumentado los suicidios, principalmente en edades entre los 10
y 17 años; por sexo, la tasa es de 8.5 por cada 100 mil hombres y de 2.0 por cada 100 mil mujeres y
son los adolescentes en rango de edad y los médicos en profesión quienes más lo hacen.
Algunos síntomas de ideas suicidas, son el cambio de comportamiento, altibajos emocionales,
trastornos del sueño, ansiedad, depresión, conductas autodestructivas y cambios en la alimentación.
Los lazos afectivos pueden reducir el riesgo de suicidio, hay estudios que muestran que el
aislamiento social lo aumenta, de ahí que psicólogos invitan a familiares o amigos cercanos a quienes
presentan los síntomas anteriormente mencionado, a escuchar de forma empática, ser comprensivo
y no hacer juicios a la persona, es importante tomar serio cualquier signo de depresión y/o
comentarios sobre deseos de muerte y tomar medidas al respecto buscando la canalización de la
persona con atención profesional.