Huyendo de la violencia la familia Paniagua abandonó su natal Michoacán, don Ignacio con sus padres y hermanos llegó siendo aún joven a Guaymas, una ciudad que gozaba de tranquilidad y les permitiría comenzar con un negocio que les diera un patrimonio para el futuro, iniciando con un vivero que aún mantiene a la familia.
Lamenta que ahora, sus familiares que permanecieron en Michoacán hayan tenido que empezar a migrar porque las cosas no pudieron mejorar.
Lamentablemente el lugar que eligieron para rehacer su vida se convertiría después también en un lugar del que quieren escapar, Guaymas ya no de la ciudad tranquila a la que llegaron, ahora cualquier lugar puede ser el menos indicado y todo momento se puede volver desafortunado por la violencia creciente, que mantiene a Sonora en el sexto lugar nacional de violencia,