Cuando una persona es adulta mayor las actividades diarias cambian, y en algunas ocasiones hay quienes caen en depresión por no tener actividades diversas, sin embargo es el taller de pintura para adultos mayores una de las opciones qué se brinda a todos aquellos qué ya después de jubilados sigan teniendo actividad y renueven su círculo social.
Vicky Ojeda, maestra de pintura en IMCA indicó qué en estos talleres los integrantes hacen nuevos amigos, platican de su vida, se desahogan y además de aprovechar el arte extienden lazos de amistad qué les ayuda en su relajación, liberar el estrés qué les genera el encierro.