Aunque el regreso a clases presenciales está previsto hasta que el semáforo epidemiológico esté en verde, la Secretaría de Educación comenzó a tomar algunas previsiones para evitar que los centros educativos se conviertan en focos de propagación. La Secretaría de Educación Federal ha dispuesto de un manual que establece los pasos a seguir, lo primero es la colocación de filtros de prevención. "El primero va a ser a la salida de la escuela con los padres de familia, la segunda a la entrada de la escuela, la tercera a la entrada del salón. Los niños van a tener que guardar una distancia de 1 metro y medio como lo marcan los protocolos y todos los niños tienen que portar cubrebocas al entrar a la escuela", señaló el secretario de educación en la entidad, Andrés Domínguez.
Las autoridades educativas señalan que no se puede tomar esta información como definitiva, pues al paso que se van descubriendo nuevas características del virus, las medidas de prevención podrán irse modificando. Hasta el momento y de acuerdo a lo que se conoce del COVID-19, se está preparado para el regreso a clases con las medidas preventivas y el respaldo de las autoridades que cuidarán los protocolos se lleven a cabo. "Las va a vigilar en primera instancia que ya está integrándose en las escuelas y la otra vamos a pedir apoyo a la secretaría de salud. Como el regreso es incierto precisamente ese tema lo cuidamos muy bien para evitar cualquier situación que nos pudiera afectar porque finalmente nunca vamos a regresar como estábamos antes, ya vamos a tener que tener las precauciones debidas con su sana distancia".
La SEP tampoco ha aclarado si aumentó o disminuyó la cantidad de niños y niñas inscritos a este nuevo ciclo escolar, solamente han señalado que muchos de los que asistían a escuelas privadas solicitaron su cambio a una escuela pública, por lo que el reto será lograr que la infraestructura existente sea suficiente para albergar a los niños y niñas que cursan la educación básica.