Los caballos han sido usados desde hace miles años por los seres humanos para muchas actividades, actualmente la actividad terapéutica es una más de estas actividades pues el caballo posee características musculares únicas y al paso, transmite vibraciones al cuerpo del jinete y en consecuencia a su cerebro, fomentando las conexiones nerviosas del mismo por lo tanto la terapia consiste en aprovechar los movimientos multidimensionales del caballo para estimular musculatura, huesos y articulaciones, así mismo la hipoterapia relacionada a la terapia con equinos está enfocada al tratamiento neurofisiológico de los asistentes. El ritmo del caballo, unido a su calor corporal y al bamboleo de su lomo pueden ayudar a mejorar la movilidad y el equilibrio de aquellos que lo necesiten.
Esta tipo de terapia se recomienda a personas que padezcan enfermedades y discapacidades como:
esclerosis múltiple
autismo
síndrome de Down
espina bífida
traumas cerebrales
distrofia muscular
anorexia
"el caballo es de 39 grados nosotros de 36, las temperaturas cambian y cuando sientas al niño en el caballo y suben las notas positivas por la pelvis y salen las negativas" dijo Martín Beltrán Nájera, entrenador de caballos.
Este día los primeros 8 beneficiarios del programa de equinoterapias gratuitas promovido por el diputado Rodolfo Lizárraga recibieron su primera intervención, los cuales tendrán tres terapias por semana durante dos meses y se prevé culminar este año con el grupo de 25 que hasta ahora se han anotado y han recibido su diagnóstico psicológico.
"tenemos anotados 25 niños pero cada vez están llegando más y es un programa que no va a parar los invitamos que lleven el expediente clínico del niño para seguir apoyando con más" dijo el diputado local Rodolfo Lizárraga-
Entre los beneficios de la equinoterapia se encuentran...
Disminución de la espasticidad
Mejora de la confianza y la autonomía
Mejora de la postura.
Mejora del equilibrio
Mismos que notó Elvy Verdugo desde la primera vez que su pequeño David subió en un caballo por lo que al enterarse de este servicio no dudo en anotarlo viendo desde los primeros minutos la gran sonrisa de su pequeño quien respondió al estímulo y trabajó tranquilamente con su terapeuta a pesar del aislamiento natural del espectro autista que padece.
"ocupábamos terapia de caballo para el niño y no encontrábamos y en delfinoterapia no hubo avance y la primera vez que se paseo en caballo y se bajo fue cuando me dijo mamá" señalo la beneficiaria.