Con el Miércoles de Ceniza inician los 40 días en los que la Iglesia llama a los fieles a la conversión y a prepararse verdaderamente para vivir la Semana Santa, la tradición de imponer la ceniza se remonta a la Iglesia primitiva. Por aquel entonces las personas se colocaban la ceniza en la cabeza y se presentaban ante la comunidad con un "hábito penitencial" para recibir el Sacramento de la Reconciliación.
La coordinadora de catequesis, Karla Antillón, indicó que así como un deportista se prepara para un evento importante, los católicos nos preparamos para los eventos claves de la Semana Santa a través de los pilares de la oración, el ayuno y la penitencia, pues la Cuaresma es un tiempo de crecimiento personal y espiritual, un tiempo para mirar hacia afuera y hacia adentro.