Era una muerte anunciada, pues las amenazas tenían años de haberse hecho señalaba Lupita quien en un mar de llanto está mañana compartió imágenes de la ejecución de su hijo.
Joaquín de 36 años fue asesinado por un grupo de sicarios en su casa y frente a su pequeño hijo, su madre a través de redes sociales señalaba a las autoridades que mucho tiempo pidió ayuda y nunca se le dio.
Al gobernador Alfonso Durazo le solicitaba ayuda y protección (ENTRA LA IMAGEN DEL FACEBOOK DE LA SEÑORA) pues no querían estar en la lista de las personas asesinadas o familias afectadas por el crimen organizado, sin embargo hoy forman parte de ella.
Los hombres llegaron a su vivienda ubicada en el sector San Vicente, rodearon el lugar y quebraron vidrios de ventanas e ingresaron, estando dentro de la casa la familia completa, el objetivo era Joaquín a quien dejaron sin vida en el piso de su cuarto
Minutos más tarde, se activaría código rojo en el centro de Guaymas, pues se encontró el cuerpo sin vida en una casa de huéspedes de un hombre que fue identificado como Sergio Lozano, alias el Bebo, quien fuera maestro de Civismo, ya jubilado de una secundaria local.
El semáforo delictivo en Sonora en su estadística señala que el delito de homicidio se encuentra en rojo, hasta el mes de Octubre sumaban al menos 28 asesinados en este municipio, en lo qué va del año la cifra rondaría en 138 homicidios en el Puerto y este 1 de noviembre la estadística ya marcó con dos personas a quien privaron de la vida en el marco del día de los fieles difuntos.