Recorre don Manuel las calles, impulsando por sus manos

Don Manuel López García, es uno más del incontable número de indigentes en Guaymas, hace 10 años perdió sus piernas por una caída del tren en Mazatlán Sinaloa, tratando de viajar a Piedras Negras, recientemente le regalaron una silla de ruedas que le robaron de inmediato y por años años ha tenido que impulsarse con sus manos para trasladarse de un lugar a otro, viviendo solo de la caridad de las personas. 

Manuel de 65 años, es originario de estación Corral, si bien tuvo una pareja no procreó hijos, trabajó como pescador y cuando terminaba la temporada camaronera se trasladaba a otros lugares buscando otra actividad y fue ahí donde ocurrió su accidente, lo que no le permitió volver a los barcos. 

Duerme bajo un árbol en el estacionamiento del IMSS de la calle 10, ahí es donde le dan oportunidad de quedarse y come con lo que recibe de las personas que cooperan con él en las calles, comiendo una vez al día, refiere que se enferma poco y que sus brazos ya son fuertes para poder con su cuerpo, cuando no consigue raite, a diferencia de muchos indigentes Manuel está lúcido y consciente de su vida, pero dice disfrutar ser un hombre errante, a pesar de todo.