La Santa Muerte es una figura popular de la idiosincrasia mexicana que personifica la muerte y es objeto de culto el cual se remonta a 1795, cuando los indígenas adoraban un esqueleto al que llamaban muerte en el centro de México, la leyenda popular fue transmitida de boca en boca ya que por siglos permaneció oculta.
Este es un culto que ve a la muerte como algo innegable en la vida, una ley natural y que se tiene que aceptar. Se entiende a la muerte como un ser sufriente que se encarga de un trabajo penoso, que se le dio un gran poder pero una carga aún más grande.
Los creyentes se reunirán en torno a ella con oraciones y música la madrugada del 2 de noviembre, como la tradición mexicana de velar a los santos en su día, llevando veladoras y flores, entre otras ofrendas para compartir con el resto de los devotos de la niña blanca o la santita como también la llaman.
La velación iniciará a las 8 de la noche del 1 de noviembre y permanecerán hasta la 1 de la madrugada del día 2 en la calle 11 avenida 3 de la Colonia Yucatán.