Avanza proceso revocación de concesión de relleno sanitario

El alcalde de Hermosillo, Fermín González Gaxiola, dijo que, en la etapa de alegatos, por parte del municipio y la compañía, se encuentra el proceso de cancelación de la concesión del relleno sanitario.

"Esperemos que tengamos el mismo resultado como fue en el alumbrado público. Ustedes saben que son empresas que se benefician de manera leonina de los recursos de todos nosotros. Eso no debe ser", puntualizó.

Señaló que la basura no se entierra en el relleno sanitario y queda expuesta a cielo abierto provocando contaminación al aire.

Diariamente el relleno sanitario recibe 770 toneladas de basura, 650 son doméstica y 120 procedentes de empresas.

El Ayuntamiento de Hermosillo debe pagar alrededor de 5 millones de pesos al mes por el confinamiento de la basura a la concesionaria, mientras que los costos para las empresas son de 1 millón de pesos.

El relleno sanitario empezó a operar en 1996 concesionado a la empresa Tecmed con vigencia a 2016 y en ese último año se renovó el permiso por 10 años más.

Manuel Martínez Cruz, encargado del relleno sanitario por la empresa Tecmed, explicó que la basura se coloca en celdas que tienen una extensión de 4 a 5 hectáreas cada una y la base de ese espacio es forrado con una membrana de plástico para evitar que los lixiviados, cuando empieza a degradarse los desechos orgánicos e inorgánicos, no se filtren en el subsuelo.

Cada vez que se acumulan tres metros de residuos se cubren con tierra y colocar tubos para que emanen los gases que se generan por los desechos.

"Eso (celdas) se van llenado en capas que normalmente son tres metros que se van cubriendo con tierra hasta llegar a la vida de la celda

Señaló que el Ayuntamiento de Hermosillo debe 260 millones de pesos a la empresa Tecmed desde 2017 a la fecha por el confinamiento de la basura doméstica y que en caso de que llegar a un arreglo la empresa con el municipio, se pedirá una indemnización cuyo monto está en negociación.

El relleno sanitario tiene una extensión territorial de 50 hectáreas y se han usado 32 de ellas y faltan 18, por lo que en caso de que el municipio opere este lugar por revocarse la concesión, indicó que todavía hay espacio para que el lugar siga en funciones para 20 años más.

En tanto, la investigadora ambiental de la Universidad Estatal de Sonora (UES), Maribel Pallanez Murrieta, dijo que la basura expuesta a cielo abierto empieza a degradarse rápidamente por la intensidad de los rayos solares en Hermosillo por lo que contamina al aire con metales pesados como metano, dióxido de carbono, nitrógeno, sulfuro de hidrógeno, monóxido de carbono, amoniaco y que provocan problemas respiratorios y cáncer en las personas que respiran esos contaminantes, además dañan la capa de ozono y afectan el cambio climático.

En el caso de que las celdas no cuenten en su base con la membrana, esto ocasionará que los líquidos de la descomposición de la basura generen metales pesados como plomo, cadmio y arsénico que se filtrarán al subsuelo y mantos acuíferos y si el agua no se potabiliza correctamente puede ocasionar severos daños en las personas.

 "Estos metales obviamente nos puede generar enfermedades a la sangre, a los huesos, al hígado, también algunas mutaciones, también algunos tipos de cánceres", agregó.