Ebrard busca evitar nuevos aranceles en reunión clave con Trump
El secretario de Economía de México, Marcelo Ebrard, viajará a Washington esta semana para sostener conversaciones clave con Howard Lutnick, nominado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, para ocupar el cargo de secretario de Comercio.
El principal tema de discusión será la posible imposición de aranceles a productos mexicanos, una medida que podría tener un impacto significativo en la economía del país. Ebrard se reunirá con Lutnick para intentar resolver esta situación y evitar la aplicación de impuestos adicionales.
El gobierno mexicano también está gestionando una reunión de alto nivel entre el gabinete de seguridad mexicano, encabezado por Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), y funcionarios de seguridad de Estados Unidos. Claudia Sheinbaum, presidenta de México, mencionó en su conferencia matutina que las reuniones aún están en proceso de organización, pero se espera que se concreten pronto.
Sheinbaum expresó su confianza en que estas reuniones permitirán llegar a un buen acuerdo, especialmente después de que, el 3 de febrero, se lograra una pausa temporal de los aranceles generalizados del 25 % sobre productos mexicanos.
Esta medida se había suspendido a cambio del despliegue de 10,000 elementos de la Guardia Nacional mexicana en la frontera con Estados Unidos, lo que mostró una disposición para resolver de manera cooperativa los problemas fronterizos.
México también se enfrenta a nuevos desafíos. En marzo, se prevé la imposición de aranceles del 25 % al acero y al aluminio mexicano, además de la posible aplicación de impuestos a los autos fabricados en el país. Estas amenazas se suman a las recientes acusaciones de Trump, quien ha señalado al gobierno mexicano de permitir el tráfico de fentanilo y migrantes hacia Estados Unidos.
Sin embargo, Sheinbaum destacó que la situación podría tener un giro positivo. Mencionó que, por primera vez, Marco Rubio, el secretario de Estado estadounidense, reconoció que el tráfico de armas de Estados Unidos hacia México también es un problema significativo. Este reconocimiento abre la puerta para abordar de manera más integral los problemas fronterizos y de seguridad, no solo en términos de drogas, sino también de armas.
México ha pedido a Estados Unidos que asuma una mayor responsabilidad en la lucha contra el tráfico de armas hacia su territorio, especialmente en lo que respecta a armas de alto poder. La presidenta mexicana resaltó que se están realizando esfuerzos para asegurar que estas reuniones entre ambos gobiernos den como resultado un acuerdo que beneficie a ambos países.
Con estos desafíos en el horizonte, el gobierno mexicano está trabajando para evitar nuevas medidas arancelarias y avanzar en una cooperación más efectiva con Estados Unidos en temas de seguridad y comercio. Las próximas semanas serán cruciales para definir el rumbo de las relaciones bilaterales entre ambas naciones.