Con los ingresos que percibe de la llantera que tiene por negocio, María Corrales Romero es como ha sacado adelante a sus dos hijos de 27 y 19 años de edad.
La madre de familia de 51 años de edad comenzó hace 20 años a trabajar en este oficio con ayuda de su esposo quien falleció hace dos años.
Platicó que fue difícil en los primeros años dedicarse a cambiar y parchar neumáticos porque la mayoría de los clientes eran varones y la mayoría tenía la incertidumbre si una mujer podría hacer este trabajo que tradicionalmente es realizado por hombres.
"Ha sido muy difícil, pero, vas adquiriendo la fuerza y la destreza para poder hacerlo", contó.
Con el paso de los años, dijo, que los varones han cambiado su percepción de que las mujeres tienen un buen desempeño en ser llanteras y otros oficios que convencionalmente estaban a cargo del sexo masculino.
"Las mismas mujeres también me van recomendando con otras mujeres. Se sienten con más confianza y nos sentimos mejor, platicas a gusto con ellas, haces amistades con muchas", dijo.
Aunque extraña el apoyo y la convivencia de su esposo, comentó, que sus hijos son su mayor orgullo y que ha seguido sacándolos adelante, el menor de ellos estudia Ingeniería en Mecatrónica en la Universidad de Sonora y el mayor es egresado de Ingeniería Industrial en la Universidad Estatal de Sonora (UES).
Este 10 de mayo, María se tomará un descanso de su negocio para disfrutar de una rica comida que le organizarán sus hijos por el Día de las Madres acompañadas de más familiares.