Como el caso de Ámbar Dolores, joven de 20 años calcinada en su departamento en Hermosillo en 2019, hay muchos otros feminicidios en espera de justicia, tras no haber sentencias condenatorias dictadas por jueces, indicó Silvia Núñez Esquer.
La representante del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio en Sonora dijo que en casos como este, que generan controversia social por la forma violenta en que son asesinadas las mujeres, es normal que se establezca ampliación de plazos para audiencias en las que se deberá dictar una condena, ya que permite a la fiscalía reunir más elementos probatorios para lograr una sentencia justa.
"Pero no es el único caso, hay muchas asesinadas y solamente conocemos los que nos da a conocer la fiscalía y lo da como un logro, cuando en realidad no es la fiscalía la que sentencia, pero se da conocer su logro en el sentido de que su resolución y su trabajo rápido y expedito que hizo de su investigación, pues tuvo como resultado una sentencia".
El sábado 7 de septiembre de 2019 un juez penal de distrito vinculó a proceso y dictó prisión preventiva oficiosa a tres presuntos responsables por la muerte de la joven Ámbar Dolores Vázquez Ayala, de 20 años de edad, quien fue encontrada calcinada en su domicilio en la colonia Ley 57, el 30 de mayo de ese año.
Los imputados son Luis Fernando "N", del 23 años; Edgar Patricio "N", de 28 años; y Miguel "N", de 29 años, por los delitos de feminicidio, violación agravada y robo con violencia.
Además, en la audiencia de vinculación se estableció un plazo de seis meses para el cierre de la investigación complementaria. A la fecha sigue pendiente la sentencia condenatoria.
Ámbar Dolores era estudiante de la Universidad Vizcaya de las Américas. Su meta en la vida era construir casas a los más pobres, por eso, hace poco más de dos años había salido de Santa Ana, su ciudad natal, para estudiar Arquitectura en Hermosillo.