Las carreras por salir de casa y ganarle al tráfico, alcanzar a medio desayunar y llegar antes del cierre de la escuela, son las actividades que no extrañan los alumnos de educación privada en tiempos de pandemia y educación a distancia.
A poco más de un mes de concluir el ciclo escolar, antes de las vacaciones decembrinas, los niños muestran adaptación a la nueva forma de impartición de clases; desde sus hogares, frente a una computadora.
Para Oscar de cinco años, fue fácil adaptarse a la educación a distancia y recibir sus clases de preescolar en un escritorio que le adaptó su mamá en la sala de su casa, ya que se evita momentos de estrés, sentado en el auto mientras lo trasladan a su escuela.
"Pues mejor porque, ya que no tengo que estar sentado allá en el auto, esperando, si me gusta más aquí".
Danna Sofía, comenzó el ciclo escolar en agosto pasado inconforme, esperando que su estadía en casa con educación a distancia, fuera temporal ya que parte de su rutina y su forma de aprender era interactuando con sus maestros y compañeros, pero después de tres meses la comodidad de la tecnología le hizo cambiar su perspectiva.
En la escuela normal puedo estar con mis maestras y mis compañeros y aquí pues es más fácil trabajar, porque casi todo lo hacemos en la computadora".
"La maestra a veces se traba, o la saca el internet y no nos puede explicar a tiempo".
Mantenerlos seguros en casa y ahorrarse el tiempo por los traslados de tres niños de distintos niveles educativos, fue lo positivo que Ana Lidia Ruíz encontró de las clases a distancia, puesto que, gran parte de su tiempo por la mañana y tarde, lo dedicaba a preparar a sus hijos para la escuela y cursos extracurriculares vespertinos.
"Mientras sea un regreso seguro, yo estoy dispuesta a que vuelvan, pero si eso implica que se enfermen, que estén mal y que sigan faltando a la escuela porque se enfermaron; pues no, los prefiero aquí, sanitos y en casa".
La crisis económica y la falta de cuidados particulares de los niños en casa, hizo que, al corte de octubre, en las escuelas privadas del estado, una baja del 50 por ciento en el alumnado en preescolar, 20 por ciento en primarias y 10 por ciento en secundarias y preparatorias, indicó José Rogelio Valero Calle, presidente de la Federación de Escuelas Particulares Sonora Norte.
"Si hubo parte de eso, que se fueron a escuelas públicas, en unos casos, en otros casos también hubo cambio de escuelas entre mismos particulares, en ocasiones buscaron escuelas, o cambiaron el nivel de costo de las escuelas, bajaron por escuelas de menor costo, también viendo la cuestión económica la familia que les afectó".
En total a la fecha 16 mil 500 alumnos inscritos en escuelas particulares, comentó, y se tiene conocimiento de dos planteles de preescolar y primarias juntos, que cerraron operaciones por falta de alumnado.