Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, concluyó su visita a Taiwán, en la que prometió que su país "no abandonará a Taiwán. Ignorando las advertencias hechas por el gobierno chino, la líder demócrata, visitó el parlamento taiwanés y se reunión con la presidenta de la isla asiática, Tsai Ing-wen. Nancy Pelosi fue condecorada en agradecimiento por su apoyo al territorio. La política estadounidense describió a Taiwán como un modelo para la región en comparación con China. Pelosi aprovechó su estancia en la isla para reunirse con activistas proderechos humanos.
Alrededor de las 18 horas (hora local), Nancy Pelosi salió de la isla con rumbo a Corea del Sur.
Por su parte, el gobierno de Beijing, continúa con sus ejercicios militares a menos de 20 kilómetros de la isla taiwanesa; el despliegue militar chino en seis zonas estratégicas es la mayor amenaza a la independencia de Taiwán en décadas.