Los planes de una feliz Navidad se volvieron sombríos para los familiares y personas que viajaban en el autobús de la línea Mayitos el pasado viernes 23 de diciembre calcinado por las llamas que provocó un choque por alcance ocasionado por el impacto de un tráiler.
En el autobús que viajan 45 personas, 12 resultaron lesionadas, entre ellas una menor de cinco meses de nacida herida de gravedad, por lo que fue trasladada al Hospital Infantil del Estado de Sonora (HIES) donde permanece con diagnóstico médico grave, con fractura craneal en los dos huesos parentales, además de una contusión por golpes que dañaron sus pulmones, indicó Héctor Manuel Esparza Ledezma, director del Hospital Infantil del Estado de Sonora.
"La evolución hasta el momento del estado de shock (por golpes) es favorable, pero estamos a la espera de ver cómo reacciona desde el punto de vista neurológico, con esta ventana neurológica que habrá de durar entre 48 hasta 72 horas para ver cómo evoluciona su cerebro".
Mencionó que existe riesgo de secuelas por la fractura craneal que sufrió, sin embargo, el diagnóstico certero se dará una vez que verifiquen la evolución de la menor al retirar algunos de los medicamentos que se le suministran en cuidados intensivos pediátricos.
Detalló que, luego del impacto por el choque al autobús, tardaron entre 15 y 20 minutos en encontrar a la bebé que salió proyectada por una abertura del camión y hallada a unos metros del accidente sobre un charco de diésel.
En tanto, la secretaría de Salud del Estado informó que siete de los ocho pacientes internados en el Hospital General del Estado fueron dados de alta el sábado 24 de diciembre, mismos que fueron intervenidos por traumatismo craneoencefálico, dolores intensos en extremidades y articulaciones y politraumatismo.