Durante recorridos de prevención y vigilancia realizados por la Secretaría de Seguridad Pública, elementos de la Policía Estatal identificaron a un venado atrapado dentro de un canal de agua, en riesgo de ahogarse, en el municipio de Huatabampo.
Al percatarse del peligro, los agentes actuaron con rapidez para rescatar al animal, utilizando las medidas necesarias para evitar que sufriera lesiones.
Se trata de una especie endémica de Sonora que enfrentaba un serio riesgo dentro del canal.
Tras el rescate, el venado fue liberado y puesto a salvo para que regresara a su hábitat natural.
### Venados más comunes en Sonora
**Venado bura**
Es un venado grande y robusto. Sus astas se ramifican de forma dicotómica, a diferencia del venado cola blanca, cuyas astas son digitiformes. Su cola es poco poblada de pelo, de un color amarillento homogéneo con la punta cubierta de pelos negros. Sus orejas son muy grandes. Los machos adultos presentan una coloración rojiza oscura o casi negra en el lomo.
**Venado cola blanca**
Se distingue por el mechón de pelos blancos en la base de la cola, que eriza cuando está excitado o en huida. Su figura es estilizada y fina. Tiene un cuello largo, cabeza alargada y patas delgadas pero fuertes.
Solo los machos presentan astas, las cuales se dirigen hacia fuera y adelante del cráneo, con una rama principal de la que emergen de dos a seis ramificaciones. Las orejas, de gran tamaño, miden aproximadamente la mitad de la longitud de la cabeza, aunque son más pequeñas que las del venado bura.
Su pelaje es café grisáceo en invierno y rojizo en verano, aunque no todas las subespecies cambian de color. Los cervatillos tienen un pelaje rojizo moteado de blanco hasta los tres meses de edad. El vientre y la cara interna de las patas son blancos. Su cola es café o gris en la cara externa, con los bordes y la cara interna rodeados de largos pelos blancos.
La glándula metatarsal mide entre 15 y 30 mm de longitud, y la fosa lacrimal es mucho menos profunda que en el venado bura.