Samanta venció el cáncer a sus tres años de edad

Samanta Esther Quiñones Volado, de 3 años de edad, es una guerrera, luchadora y un caso de éxito por vencer el cáncer de paladar, padecimiento que le fue diagnosticado cuando tenía 11 meses de nacida y que este 8 de enero fue dada de alta en el Hospital Ignacio Chávez, del Isssteson.

Fue el pasado 13 de enero, cuando Samanta tocó la campana como símbolo de vencer el cáncer en donde recibió aplausos de parte de su papás, su hermana de 7 años y del personal de salud del hospital.

Eleazib Quiñones Román, padre de Samanta, platicó que cuando su hija tenía 11 meses de nacida le observaron una pequeña bolita en el lado izquierdo de su paladar,  protuberancia que sangraba contantemente, por lo que la llevaron a la Unidad Familiar del Isssteson, en Santa Ana, para su revisión médica.

La familia de la pequeña radica en dicha localidad y la Samanta cuenta con seguridad social del Isssteson, ya que su papá trabaja en la Universidad de Sonora, campus Santa Ana.

Eleazib contó que los médicos del lugar le informaron que se trataba de una infección. Sin embargo, tanto él como su esposa no quedaron conforme con el diagnóstico y se llevaron a la menor con un médico particular en la misma comunidad.

"La llevé con otro médico familiar, particular y fue el que me dijo: es un tumor, esto es un tumor, es tumorcito, se está reproduciendo y te voy hacer un papeleo, un trámite y vale más que te lleves a la niña a Hermosillo", comentó.

Relató que se trajo a Samanta al Hospital Ignacio Chávez, en Hermosillo, en donde fue atendida por Homero Rendón García, médico oncólogo pediatra, mismo que le practicó una biopsia a la pequeña cuyo diagnóstico fue que padecía un tumor maligno.

Fueron 18 meses que Samanta estuvo tratamiento médico con quimioterapias, en conde muchas ocasiones la menor mostraba buen ánimo, una buena actitud que dejaba asombrados a sus papás y al personal de salud del nosocomio.

"Gracias a Dios mi niña, en los primeros meses estaba feliz, porque ella no la veíamos mala, le ponían sus quimioterapias, sus dosis, y salía de los normal, si nos podía cunado la picaban y todo, pero a ella nunca la vimos vomitando, llorando por un dolor que se quejara por algo, siempre fue una guerrera, siempre luchó muy bien", destacó.

El pasado 8 de enero, la familia de Samanta recibió la noticia de parte del doctor Homero Rendón que la niña estaba curada del cáncer y cinco días después fue dada de alta en donde tocó la campana como un caso de éxito de vencer esta enfermedad.

Eleazib Quiñones Román está agradecido con Dios y con el personal de salud del Hospital Ignacio Chávez por su ayudar a que su hija se aliviara.

Ahora, Eleazib quiere ayudar con palabras de aliento a otros papás que estén pasando por la misma situación para que con fe en Dios, esperanza y la ayuda del personal médico se puede curar sus hijos del tipo de cáncer que padezcan.