Iván Alejandro Vacio, de 46 años, padeció tosferina hace seis años. Sin embargo, tardó casi un año en recibir el diagnóstico por parte del sector salud, tanto público como privado, en Hermosillo.
Platicó que, en enero de 2020, comenzó a tener dificultades para respirar al toser, además de fiebre, dolor en el pecho, pérdida de apetito y la necesidad de dormir sentado, ya que acostarse boca arriba o boca abajo le provocaba falta de aire.
"De repente hubo un cambio, o sea, la tos con flema desapareció y apareció una tos muy distinta, es una tos muy particular porque, en realidad, no sientes que esté en los pulmones, como una tos con flema, sino entre la garganta y la boca del estómago, como que se cierra, entonces, lo que tú buscas es tratar de respirar y en ese esfuerzo expectoras una sustancia blanca", relató.
Le recetaron una gran cantidad de medicamentos en el Hospital del Issste y en un hospital privado donde recibió atención médica, pero ningún tratamiento lo aliviaba. A veces le realizaban exámenes clínicos, mientras que en otras ocasiones el médico solo lo revisaba durante cinco minutos y le recomendaba ciertos medicamentos.
Casi un año después de haber enfermado, decidió investigar en internet los síntomas que padecía y encontró un video donde una persona hablaba sobre la tosferina, describiendo exactamente los mismos síntomas que él tenía.
Mencionó que acudió a un laboratorio clínico particular para realizarse una prueba de tosferina y, días después, recibió un resultado positivo. Llevó esos estudios al Hospital del Issste, donde finalmente recibió el tratamiento adecuado, logrando recuperarse por completo un año y medio después.
En 2025, se han confirmado dos casos de tosferina en Sonora: una niña y un niño, ambos de seis años y residentes de Hermosillo. Ambos presentan síntomas leves y se están recuperando en casa, según informó la Secretaría de Salud.
Martha Ivette Anchondo Martínez, médico pediatra, explicó que la tosferina es una infección bacteriana altamente contagiosa que provoca una tos violenta e incontrolable, la cual puede durar semanas o incluso meses. Es causada por una bacteria que se encuentra en la boca, la nariz y la garganta de una persona infectada.
La especialista apuntó que personas de cualquier edad pueden contraer la enfermedad, pero la población más vulnerable son los menores de 5 años.
"Los adultos pueden presentar un cuadro respiratorio, no tan intenso como el de los niños, quienes pueden llegar a sufrir apneas e incluso muertes.", puntualizó.
La médico pediatra comentó que las vacunas Hexavalente y PDAP, que incluyen el biológico contra la tosferina y otros virus, protegen hasta un 98% si se aplican las cuatro dosis contempladas en los primeros cuatro años de vida de un niño y un refuerzo a los 10 años.
Si los adultos no se aplican un refuerzo cada 10 años a partir de los 20 años, su organismo queda vulnerable a contraer la enfermedad.