Al cumplirse 13 años del incendio del Casino Royale, donde murieron 52 personas, en Nuevo León, familiares de las víctimas develaron un nuevo memorial con una frase dedicada a los responsables de la tragedia.
"Que su sangre derramada y las lágrimas de sus familias les persiga siempre y no encuentren paz donde quiera que estén", dice la estructura que fue colocada en donde se encontraba el inmueble, sobre la avenida San Jerónimo.
El Municipio de Monterrey diseñó el memorial de siete metros de alto y que al centro tiene un corazón rojo con los números "52+2", en referencia al número que personas que fallecieron al interior de la casa de apuestas, incluyendo a dos mujeres embarazadas.
La administración que encabezó Luis Donaldo Colosio Riojas explicó que el memorial se creó después de diversas reuniones con los deudos para lograr que el proyecto representara sus sentimientos por la pérdida de sus familiares durante el ataque perpetrado por el crimen organizado.
En representación del Gobierno de Monterrey estuvo Francisco Donaciano Bahena Sampogna, Encargado del Despacho de la Presidencia Municipal.
"Son duras las palabras que están plasmadas en el monumento que hoy entregamos a ustedes, familias, como homenaje a su dolor, como reconocimiento de lo que ocurrió.
En la dureza de esas palabras va también el enérgico reclamo que ustedes, con justicia, exigen de sus autoridades: que esto no vuelva nunca a ocurrir y que los nombres de los fallecidos nunca sean olvidados", dijo el funcionario regio.