A partir del 1 de enero de 2025, el gobierno federal ha establecido cuatro nuevas secretarías federales con el objetivo de fortalecer áreas clave en la administración pública: igualdad de género, ciencia, buen gobierno y digitalización
Estas reformas, impulsadas por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, amplían el número de secretarías de 18 a 22.
La Secretaría de la Mujer, encabezada por Citlalli Hernández, sustituye al Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), que operaba desde 2001. Esta dependencia tiene como misión consolidar políticas públicas que promuevan la igualdad de género en México. Durante su presentación oficial, Hernández destacó: "Este momento no es solo un triunfo institucional, es una declaración de principios: nunca más las mujeres serán invisibles en la construcción de la nación".
La SECIHTI, dirigida por Rosaura Ruiz Gutiérrez, reemplaza al extinto Consejo Nacional de Humanidades, Ciencia y Tecnología (Conacyt). Esta secretaría se enfocará en la promoción de proyectos intersecretariales e internacionales, con especial atención en la restauración de ecosistemas clave del país, como las cuencas del Lerma-Santiago, Tula y Atoyac. Además, gestionará las universidades públicas Universidad Nacional Rosario Castellanos y la Universidad de la Salud, y dará continuidad al Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores (SNII) y los programas de becas nacionales e internacionales.
Bajo la dirección de Raquel Buenrostro, esta secretaría absorbe las funciones de la extinta Secretaría de la Función Pública (SFP) y del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI). Su objetivo principal es fortalecer la lucha contra la corrupción y promover prácticas de buen gobierno en la administración pública.
Esta agencia, dirigida por José Merino, tiene el mismo nivel que una secretaría y se dedicará a digitalizar trámites gubernamentales y servicios públicos, con el objetivo de mejorar la eficiencia administrativa y facilitar el acceso de la población a los servicios del gobierno. Merino ha afirmado que buscará "reducir los trámites a la mitad" y desarrollar plataformas tecnológicas que permitan agilizar los procesos para la ciudadanía.