El peso mexicano registró una apreciación notable en la primera sesión de la semana, impulsado por la debilidad del dólar estadounidense
Este movimiento se atribuye a informes que sugieren que la próxima administración de Estados Unidos, encabezada por Donald Trump, podría implementar planes arancelarios menos extensos de lo inicialmente previsto.
Al cierre de la jornada, el tipo de cambio se situó en 20.3096 pesos por dólar, según datos del Banco de México (Banxico). Esto representa una ganancia de 36.28 centavos, equivalente al 1.76%, en comparación con las 20.6724 unidades registradas el viernes anterior.
Durante el día, el dólar fluctuó entre un máximo de 20.6669 y un mínimo de 20.2437 pesos. El Índice Dólar (DXY), que mide la fortaleza del billete verde frente a una canasta de seis monedas, descendió un 0.62% hasta las 108.27 unidades
Los mercados reaccionaron a una publicación de The Washington Post que indica que los planes arancelarios de la administración entrante podrían centrarse únicamente en importaciones críticas para la seguridad nacional y económica de Estados Unidos, en contraste con las amplias medidas anticipadas
Este cambio en las expectativas ha generado optimismo en los mercados financieros. Analistas señalan que la posibilidad de medidas arancelarias más limitadas reduce las tensiones comerciales y favorece a monedas emergentes como el peso mexicano
El valor del dólar frente al peso mexicano fluctúa debido a una variedad de factores económicos, políticos y sociales tanto en México como en Estados Unidos. Uno de los principales determinantes es la economía estadounidense; un crecimiento sólido en EE. UU. tiende a fortalecer el dólar, mientras que problemas económicos o políticos pueden debilitarlo. La política monetaria de la Reserva Federal también juega un papel crucial; por ejemplo, un aumento en las tasas de interés puede hacer que el dólar sea más atractivo para los inversionistas, lo que incrementa su valor. Además, la inflación en EE. UU. influye en la percepción del dólar; altas tasas de inflación pueden llevar a una depreciación de la moneda.