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17 de Diciembre del 2024
Sociales

José vende pitayas desde los diez años

José vende pitayas desde los diez años

Como cada año, los colimenses esperan con ansias la temporada de pitayas para poder degustarlas y disfrutar de este jugoso y suculento manjar también conocido como la fruta del dragón.


José Díaz Solano, es una de las personas que se dedican al corte y venta de pitayas, quien heredó este oficio de su padre desde que tenía diez años de edad.


"Mi papá me mandaba a vender, el antes vendía en el rancho/se me hace bonito porque a veces se gana el dinero rápido aunque a veces se batalla/lo mínimo tengo que vender unas 300 o 250 y si las vendo antes vendía más pero hay mucha competencia mucho vendedor antes vendía rápido".


Diaz Solano señala que durante los meses de abril, mayo y junio se levanta a las 5:00 de la mañana porque a más tardar a las 6:00 ya tienes que estarlas cortando, para ello, se lleva sus herramientas indispensables de trabajo, un carrizo con pico de metal para poder manipular la fruta, una lámpara para poder observar mientras amanece, la cortan y la colocan en los chiquihuites o canastos para posteriormente quitarle las espinas con un tenedor o cuchillo. Dijo que se trata de un proceso que debe realizarse con paciencia y habilidad, pues las pitayas son delicadas y si se dañan deben desecharlas.


"Se llaman órganos los árboles de donde las bajan, es como el cactus/hay que pelarlas con un palo así como esta pitaya se tiene que pelar con fuerza, se ha espinado? si todos los que pelan pitayas se espinan, es un trabajo duro, pues cuando ya está acostumbrado no pero para los que no saben si".


Asegura que se trata de un oficio que le agrada mucho, más aún cuando el cliente se va satisfecho después de consentir su paladar.


"Casi mucha gente viene de Estados Unidos a comer pitaya de aquí en Colima, a eso vienen, dicen que estás pitayas están más buenas que las de Piscila/están en 3x25 pero depende de la pitaya si está chiquita o grande la da más barata uno, la gente si las paga uno que otro regatea pero el que tiene ganas de comer pitayas paga la cantidad que quiere/lo que más me gusta es cuando termino de vender rápido".





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