Manuel tiene 28 años trabajando como sepulturero

Manuel de Jesús Hernández Domínguez está por cumplir 28 años dedicándose al oficio de sepulturero en el cementerio municipal de Colima.

Reveló que la falta de un empleo a su llegada a Colima, fue lo que lo impulsó a aceptar esta oferta de trabajo.

"Busqué trabajo en otras áreas y no encontraba trabajo, llegué aquí porque una persona me invitó y lo agarré".

"Es muy difícil acostumbrarse por que de primero, mira te contaré una historia que pasé hace como 27 años y medio, cuando estaba recíén entrado íbamos a sepultar a una señora y la muertita era mamá de un pequeñito, el niño estaba llorando y me puse en su lugar y derramé algunas lágrimas, es uno sensible en esos aspectos".

Hernández Domínguez, también ha realizado la labor de velador en el campo santo, quien descartó sentir miedo a lo sobre natural y o haber tenido alguna vivencia de este tipo.

"He escuchado pero no es cosas de muertitos, son armadillos u otro tipo de animal/eso de los muertitos no es cierto, la gente piensa que los muertitos salen y asustan a la gente, siempre he dicho que hay que tenerle miedo a los vivos no a los muertos".

A Manuel de Jesús nada se le complica pues le gusta mucho su trabajo, aunque su familia en ocasiones no piensan lo mismo.

"Me preguntan que si no me da miedo les digo que no, o que si es difícil/y su familia qué dice, pues que no diga, pero pues un trabajo normal como todos/a lo mejor porque les da pena, más que nada mis hijas porque mi esposa me ha dicho una o dos veces".

No obstante, el hombre considera que se trata de un trabajo honrrado y disfruta mucho lo que hace, poder auxiliar a las personas en la última morada de sus familiares y convivir con sus compañeros.