Habitantes de Suchitlán, en Comala, reconocen que, por presión social, desinterés de las mismas personas y la falta de trabajo de las autoridades en fomentar su difusión entre las nuevas generaciones, en esta comunidad rural de la entidad colimense, ya son pocas las personas que se comunican a través de una lengua indígena, en este caso el náhuatl, y, desafortunadamente, ha ido desapareciendo.
Teo Huerta: "Definitivamente se ha ido perdiendo, yo, por ejemplo, recuerdo que en la secundaria, en 2003, tres de mis compañeros hablaban náhuatl. En el último estudio del INEGI, por ahí, este, verifiqué que había cerca de 90 personas que todavía hablaban náhuatl aquí en la comunidad, sin embargo cada día se ha ido perdiendo esta lengua".
Clarisa: "Mal, porque ya se ha estado perdiendo, ya no se hace, bueno ya no tienen la costumbre de practicarla, como ahorita nosotros como jóvenes pues nos hemos alejado y las únicas personas que quedan ya pueden ser, este, abuelo, bisabuelos, pero ya gente ya más joven, pues ya, la ha dejado perder.
José Avalos: "Sí, hay pocos, ya, ya murieron todos los que pues sabían hablar en eso, verdad".
Señalan que el temor a la burla también es un factor por el que se está perdiendo esta lengua.
Teo Huerta: "En el bachillerato había todavía hace un año, personas que hablaban náhuatl y, sin embargo, ellos no manifestaban que hablaban esta lengua por temor a burla de sus compañeros".
Las personas entrevistadas también reconocen que las autoridades poco hacen para conservar esta lengua indígena entre los habitantes de la comunidad, pues nunca se ha visto un programa que promueva su práctica entre las nuevas generaciones.