Caso de colchones podridos va a juicio oral

Carlos Baltazar Castro Olivas, ex coordinador administrativo de la Secretaría de Desarrollo Social, irá a juicio oral para defenderse de la acusación por peculado y negociaciones ilícitas por la compra de colchones podridos que se entregaron a personas damnificadas por la tormenta 19-E en septiembre de 2018.

Sin embargo, llegará a un juicio con ventaja sobre la Fiscalía Anticorrupción, que en la audiencia donde debía exponer qué pruebas presentará en el juicio oral, erró en distintas ocasiones, por lo que 13 pruebas fueron rechazadas por el juez a cargo del caso.

Una de esas pruebas era el testimonio de Álvaro Ruelas Echave, ex secretario de Desarrollo Social que explicaría el gasto que se hizo para la compra y destrucción de colchones podridos.

En Cambio, la defensa de Castro Olivas logró que se admitiera una prueba pericial sobre el celular de su defendido, con la que presentarán 45 fotografías de conversaciones que tuvo con Raúl Castaños.

Este último fue Secretario de Desarrollo Social durante el tiempo en que sucedió la tormenta y se repartieron los apoyos. Además, fue quien denunció a Castro Olivas ante el Ministerio Público por la compra de los colchones.

Sin embargo, la estrategia de la defensa es demostrar que Castaños también estuvo implicado en la compra.

Hasta el momento, solo se ha podido establecer que los colchones que se compraron tuvieron un costo de 4 millones 121 mil 100 pesos, y que estos se compraron a proveedores de colchones reciclados en Jalisco a través de una intermediaria de nombre María Isabel.

En el juicio se tratará  por la Fiscalía Anticorrupción a modo de establecer que la compra fue ilícita y el dinero se otorgó a un amigo de Castro Olivas.

Mientras que la defensa buscará implicar al ex secretario de Desarrollo Social y a otros funcionarios.