La sonrisa de José Peña

Jugar, mirar la tele y hacer la tarea son las cosas que más le gustan hacer a José Peña.

Él es originario de El Papagayo, Tamazula, Durango y fue el 11 de enero de 2008 cuando este pequeño llegó al mundo y desde entonces ha aprendido a vivir la vida con alegría y  con esperanza.

"Jugar, a las escondidas, con mis sobrinitas, sí"

"Mirar la tele, Goku, Goku,

"Hacer la tarea, matemáticas

"Los carros, los carros, de carreras"

A los dos meses de nacido, por días consecutivos le dio fiebre, pero un día esto provocó que se convulsionara, quedando con secuelas de por vida.

A los años le dijeron a sus papás, que él no podía caminar y desde entonces él se traslada en una silla de ruedas, pero eso no le ha impedido vivir, disfrutar y divertirse como un niño.

Como todo un pequeño, tiene un gran sueño y cada día despierta esperando que se haga realidad.

¿Oye platícame cuál es el mayor regalo que quisieras en este día del niño?

"Caminar", sí.

A su corta edad, a José  le gusta sumar, restar, resolver problemas, porque lo que más le encanta de ir a la escuela es una materia en especial.

Actualmente cursa cuarto de primaria y aunque estudia en una escuela donde solo existe una  rampa para personas con discapacidad, eso no le ha quitado el deseo de seguir aprendiendo.

"Ciencias Naturales, Español, matemáticas

Este pequeño es uno de los tantos pacientes que recibe terapia tres días a la semana en el Centro de Rehabilitación y Educación Especial.

En las terapias cada día aprende cosas nuevas y poco a poco ha ido progresando, hoy ya se puede poner de píe y puede dar pasos apoyado de algo o de alguien.

José es como cualquier otro niño y pese a su discapacidad, la inocencia de sus ojos y la sonrisa de un niño despreocupado no  desaparecerá.