Para la organización Save the Children Sinaloa, permitir que los jóvenes de 16 a 18 puedan trabajar en las labores del campo es un grave retroceso en la lucha por sus derechos y su protección.
Ileana Castro, representante de dicha organización, señaló que una de las preocupaciones más grandes en torno a estas reformas a la ley, es que se pudiera incrementar el abandono escolar.
Detalló que en los campos agrícolas, por su condición de marginación, ya es complicado que los jóvenes continúen con sus estudios, con el trabajo en la agricultura tendrán menor disposición, pues llegarán cansados de sus jornadas laborales y no tendrán condiciones de prestar atención al cien por ciento con sus clases, lo que a la larga derivaría en el abandono escolar.
Otra preocupación que mencionó la activista que se tiene, es la de la seguridad de estos adolescentes, ya que aunque se estable en el decreto recién aprobado que no realizarán labores de riesgo, cualquier actividad agrícola pudiera ser riesgosas para los menores.
Es por ello que ya están buscando acercamiento con los legisladores federales, para analizar la situación y crear una Norma Oficial Mexicana que regule a mayor detalle este tema.