El tratamiento de aguas residuales en Durango es un servicio esencial que se enfoca en la separación de la carga orgánica presente en las aguas residuales, con el objetivo de eliminar la mayor cantidad posible de residuos y contaminantes. La ciudad se abastece de agua subterránea a través de 76 pozos y cuenta con cinco plantas de tratamiento de aguas residuales para asegurar un proceso efectivo.
Recientemente, el gobernador del estado anunció la instalación de una armadora de autos eléctricos en el Centro Logístico Industrial de Durango. La llegada de esta nueva empresa conlleva la necesidad de servicios básicos, entre ellos, el suministro de agua potable y, en este caso en particular, agua tratada. La fabricación de un automóvil implica diversas etapas, y aproximadamente 4,000 litros de agua son utilizados en este proceso, lo que destaca la importancia de contar con un suministro confiable y sostenible.
La planta oriente de tratamiento de aguas residuales en Durango tiene una capacidad de generar entre 1200 y 1500 litros de agua por segundo. Si se logra cumplir con los estándares internacionales y las normativas específicas de la empresa automotriz, este recurso tratado podría satisfacer los requerimientos del proceso de fabricación de vehículos eléctricos. Para optimizar esta colaboración, se está evaluando la posibilidad de un proyecto integral entre Aguas del Municipio y la Comisión de Agua del Estado de Durango (CAED), con el propósito de anticipar las necesidades no solo de esta empresa, sino también de futuras llegadas a la capital, evitando inversiones innecesarias y futuros ajustes.
Es relevante destacar que Durango trata el 100% de sus aguas residuales, demostrando un compromiso con el cuidado del medio ambiente y la sostenibilidad. Parte de estas aguas tratadas se utiliza en actividades como el riego de parcelas y áreas verdes en la capital, contribuyendo al ciclo sostenible del recurso hídrico.
La construcción de vehículos motorizados, en particular, es una industria que demanda grandes cantidades de agua. Este consumo abarca desde el agua utilizada en el proceso de fabricación hasta la necesaria para enjuagues, tratamientos de superficie y desengrasado de las partes mecánicas del automóvil. Por lo tanto, la colaboración entre la planta de tratamiento de aguas residuales y la nueva armadora de autos eléctricos representa una oportunidad para impulsar prácticas sostenibles y eficientes en el uso del agua en la industria automotriz de Durango.