Basura y malos olores en la Acequia, problema sin resolverse.

Un foco de contaminación persistente ya por varios años se ubica en la entrada de los fraccionamientos La Coruña y Real Victoria, situación que no ha mejorado con el paso del tiempo. La situación sigue sin resolverse, a pesar de los esfuerzos de los residentes por denunciarlo. El problema central radica en la acumulación de basura y desechos contaminantes que continúan siendo arrojados al cauce de la Acequia Grande, una zona que ya enfrenta serios problemas relacionados con la contaminación del agua.

El cauce de la Acequia Grande, se ha convertido en un vertedero improvisado de desechos de todo tipo. La presencia constante de basura, sumada a las aguas residuales que fluyen por allí, genera un foco de contaminación tanto visual como olfativo. El mal olor constante se ha convertido en una carga diaria para los habitantes cercanos, afectando su calidad de vida y salud.

Este problema no es solo estético; está directamente relacionado con riesgos sanitarios. La basura acumulada crea un entorno favorable para la proliferación de  enfermedades . Además, el contacto con aguas contaminadas y desechos puede aumentar el riesgo de infecciones gastrointestinales, problemas respiratorios y enfermedades dérmicas, especialmente entre los niños y personas con sistemas inmunológicos comprometidos.

A pesar de las quejas constantes de los residentes y de la evidente alteración al entorno, las autoridades ambientales no han tomado medidas efectivas para remediar la situación. No solo ha faltado acción en términos de limpieza y control, sino que tampoco se han sancionado a los responsables del arrojo de basura.

Este tipo de situaciones subraya la importancia de un manejo adecuado de residuos y de un sistema de sanciones para prevenir la contaminación. Los habitantes, las autoridades y la comunidad en general deben ser conscientes de que la responsabilidad ambiental recae en todos. No basta con señalar el problema; se requiere un esfuerzo conjunto y la implementación de medidas concretas, como una mejor infraestructura para la recolección de basura, campañas de concientización sobre la disposición adecuada de residuos y una intervención más activa por parte de las autoridades para frenar el arrojo ilegal de desechos. Solo así se podrá lograr una solución sostenible y mejorar la calidad de vida de los habitantes no solo de la zona, de toda la ciudad capital.