El Gobierno del Estado de Durango, en conjunto con la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Durango (COPRISED) y la Secretaría de Salud (SSA), anunció que tomará medidas para evitar casos de envenenamiento relacionados con prácticas de chamanes y retiros espirituales. Este anuncio surge a raíz del fallecimiento de una joven en un evento donde se utilizaron sustancias consideradas peligrosas para la salud.
Héctor Vela Valenzuela, funcionario estatal, informó que se encuentran investigando los hechos y se analiza la forma en que operan estos eventos, algunos de los cuales no cuentan con la regulación adecuada. Señaló que, aunque ciertos negocios de este tipo cumplen con normativas, persiste la existencia de actividades irregulares en diferentes regiones del estado. Para enfrentar este problema, se buscará reforzar la vigilancia y regulación de estos establecimientos y prácticas.
En los próximos días, Vela Valenzuela sostendrá un diálogo con Moisés Nájera, secretario de Salud del estado, y con representantes de COPRISED, con el objetivo de delinear acciones preventivas. Entre las estrategias previstas está la inspección de lugares donde se realizan retiros espirituales, la revisión del cumplimiento de normativas de seguridad sanitaria y la clausura de aquellos espacios que operen fuera del marco legal.
El caso que detonó estas acciones tuvo lugar en un retiro donde se administraron sustancias que, según las investigaciones preliminares, pudieron haber causado el fallecimiento de una joven. Este incidente encendió las alertas sobre los riesgos que conllevan ciertas prácticas, muchas veces ofrecidas bajo promesas de bienestar físico y emocional, pero que en realidad pueden poner en peligro la vida de las personas.
Las autoridades planean implementar estas medidas en todo el estado, priorizando zonas donde se han identificado este tipo de actividades. También se contempla una campaña informativa para alertar a la ciudadanía sobre los riesgos de asistir a retiros no regulados y el uso de sustancias de origen desconocido o efectos no controlados.
Con estas acciones, el Gobierno del Estado, en colaboración con COPRISED y la SSA, busca garantizar la seguridad de la población y prevenir nuevos casos de envenenamiento o cualquier otra consecuencia grave derivada de estas prácticas. La iniciativa refuerza el compromiso de las autoridades por proteger la salud de los duranguenses y fomentar la regulación de actividades que puedan representar un riesgo sanitario.