Gerardo García, un hombre de aproximadamente 30 años, protagonizó un accidente el pasado domingo por la mañana en la colonia Ciénega, ubicada al sur de Durango. García, al manejar un potente automóvil Charger, se encontraba en estado de ebriedad cuando decidió tomar la calle Fernando Carrillo. Sin embargo, al conducir bajo los efectos del alcohol, perdió el control del vehículo y se desplazó en sentido contrario. Este hecho ocurrió alrededor de las 8 de la mañana, en una zona con poco tránsito, lo que afortunadamente evitó una mayor magnitud de la tragedia.
El auto, al perder el control, terminó por chocar contra un negocio local, causando daños materiales tanto en la fachada del establecimiento como en el vehículo de García. Tras el impacto, el automóvil volcó, quedando sobre su techo, y el conductor quedó atrapado dentro del mismo. Testigos de la escena alertaron rápidamente a las autoridades a través del número de emergencia 911, por lo que una unidad de la policía y un equipo de rescate de bomberos acudieron de inmediato al lugar.
Al llegar, los servicios de emergencia comenzaron las maniobras para sacar a Gerardo García del vehículo volcado. El conductor fue atendido en el lugar y, aunque presentaba varias heridas, se encontraba consciente. Debido a la gravedad de sus lesiones, principalmente en la zona del rostro y algunas contusiones en el cuerpo, fue necesario trasladarlo a un hospital para recibir atención médica de urgencia. Según el informe preliminar, García sufrió una fractura en la mandíbula y algunos golpes leves en el pecho, pero su estado general no se consideraba de riesgo vital.
La policía, junto con peritos de tránsito, comenzó a realizar las investigaciones correspondientes para esclarecer las causas exactas del accidente. Además, se abrió una carpeta de investigación para abordar las consecuencias legales del incidente, ya que Gerardo García estaba conduciendo bajo el influjo del alcohol, lo cual agravó la situación. Las autoridades también indicaron que se tomarán las medidas necesarias para tratar las consecuencias del choque, que afectó tanto al propietario del negocio como a García mismo.
Este accidente, además de poner en evidencia el peligro de conducir en estado de ebriedad, subraya la importancia de respetar las señales de tránsito y las normas de seguridad vial.