El origen de la charrería se remonta a ese momento, cuando, en las haciendas de la época colonial, los españoles no podían con tanto trabajo, para ese entonces los indígenas y criollos no tenían permitido montar aunque eso tuvo que cambiar, al seguir esta necesidad y poder controlar el ganado, los trabajadores de las haciendas comenzaron a desarrollar habilidades y destrezas.
Al paso de los años esa actividad que representa el orgullo de ser mexicano se ha ido perfeccionando y, para el año 1921 se fundó la Asociación Nacional de Charros y 10 años después se creó la Federación Mexicana de Charrería, donde se establecieron estatutos y reglas para su práctica, así como la inclusión como deporte nacional por excelencia. Para 1996 la charrería se incluyó en la Comisión Nacional del Deporte y pasó a formar parte del Fondo Nacional del Deporte.
A nivel nacional existen más de 900 asociaciones nacionales de charros y más de 300 de escaramuzas charras y a nivel local al menos se tiene un registro de 14 asociaciones de charros.
Para lograr obtener el título de charro completo al menos deben acreditar siete de las nueve suertes charras que son:
1.Cala de caballos
2.Piales en lienzo
3.Coleadero
4.jinete de toro
5.Terna en el ruedo
6.Jineteo de yegua
7.Manganas a pie
8.Manganas a Caballo
9.El paso de la muerte
En tanto, hablar de charrería también es hablar de la elegancia, porte, bravura y destreza de las mujeres a caballo. Ellas participan con coreografías a caballo con música de fondo en donde el paso más aclamado por los asistentes siempre será el abanico o mejor conocido como el recogedor de aplausos.