Arturo Gilio sufrió un percance mientras realizaba tentaba en la ganadería de Juan Antonio del Hoyo, en el municipio de Jerécuaro, Guanajuato, y fue trasladado al Sanatorio Alcocer Pozo, donde se le apreció un esguince cervical y un traumatismo craneocefálico.
El percance se produjo cuando lidiaba un novillo de Marrón. Lo estaba pasando de muleta con la mano izquierda, y en un descuido, el ejemplar se le arranco de improvisto y no pudo esquivar la acometida y le echó mano, sufriendo una aparatosa voltereta de la que cayó de cabeza. Estando en el piso, el novillo hizo por él con codicia golpéandolo con las manos y patas. Ahí fue cuando se produjo una fractura de nariz además y el fuerte golpe en la cabeza.
El médico que le atendió, Francisco Alcocer Fernández, confirmó mediante un parte facultativo la seriedad del percance, clasificado como de pronóstico reservado.
«Presenta traumatismo craneoencefálico con Glasgow de 15 puntos, esguince cervical de segundo grado, así como fractura nasal, quedando en observación por dicho traumatismo".
Cabe señalar que Glasgow es una escala internacional 15 de 15, en la cual se evalúan diferentes parámetros neurológicos del paciente como son la respuesta motriz, la apertura ocular y la respuesta verbal y así poder darle seguimiento a su ingreso y en las siguientes horas para ver su evolución.
Durante la tarde se esperaba la visita de un otorrinolaringólogo quien haría la valoración de la fractura nasal que presenta Gilio, con la finalidad de normar el procedimiento a seguir al respecto de la misma. Como es natural, con estas lesiones, el torero se encuentra muy dolorido y a la espera de que su estado de salud vaya mejorando en las próximas horas.