Retiros, cultos y diplomados espirituales trabajan en clandestinidad; COPRISED

La Comisión Estatal para la Regulación de Servicios de Salud (COPRISED) ha emitido un comunicado en el que aclara que no es su responsabilidad regular actividades relacionadas con cultos, rituales, retiros espirituales, ni el consumo o suministro de sustancias asociadas con el ámbito espiritual o de creencias. La institución explicó que, si estas actividades se publicitan como diplomados o programas formativos, sería la Secretaría de Educación la que debería intervenir para regularlas, ya que corresponde a esa dependencia gestionar aspectos relacionados con la educación formal.

La COPRISED destacó que, debido a que los retiros espirituales y otras prácticas de carácter religioso o de bienestar suelen llevarse a cabo de manera privada y operan en muchos casos en la clandestinidad, no es posible regularlas de forma efectiva a nivel estatal o federal. La falta de visibilidad y la naturaleza privada de estas actividades dificultan el monitoreo y la intervención de las autoridades competentes.

Además, la dependencia aclaró que su función principal es velar por la seguridad y calidad de los servicios de salud en el estado, lo que no incluye la supervisión de prácticas que se desarrollan fuera del ámbito sanitario y educativo. Por ello, actividades como retiros espirituales o cultos no caen dentro del marco de competencia de COPRISED, ya que no se consideran servicios de salud ni están vinculadas con la atención médica o psicológica profesional.

El comunicado también hizo énfasis en la preocupación por la proliferación de estas actividades que operan fuera de la legalidad y sin los debidos permisos, lo que aumenta los riesgos para las personas que participan en ellas, especialmente cuando se involucran prácticas de consumo de sustancias. La COPRISED señaló que, si bien no tienen competencia para regular este tipo de eventos, es importante que los ciudadanos estén informados sobre los riesgos que pueden conllevar y se abstengan de participar en actividades que no cuenten con la debida regulación y supervisión.

Finalmente, la comisión reiteró que, aunque no pueden actuar directamente en estos casos, el marco legal correspondiente debe ser consultado por las personas que deseen realizar actividades que involucren el bienestar físico o mental de los participantes.