Con la llegada de la temporada vacacional de diciembre, los principales bulevares de la ciudad experimentan un incremento significativo en el tráfico vehicular, lo que genera largos periodos de espera para los conductores. Vías como Felipe Pescador, Francisco Villa y Blvd Guadiana se han visto saturadas, con vehículos avanzando a paso lento debido al alto volumen de autos circulando por estas arterias.
El panorama se vuelve aún más complicado por la falta de precaución de algunos conductores al intentar incorporarse a las vialidades. Este comportamiento, sumado al cansancio y la impaciencia de los conductores, genera un ambiente de estrés y ansiedad, lo que aumenta el riesgo de accidentes. La furia y desesperación se hacen evidentes mientras las horas de tráfico interminable avanzan.
Además del tráfico, el estrés causado por la congestión también afecta a los ciudadanos que se ven obligados a invertir más tiempo en sus trayectos diarios, especialmente en aquellos momentos del día cuando las filas de vehículos alcanzan su punto máximo. La combinación de vehículos de particulares, transporte público y trabajadores que deben desplazarse a sus destinos ha hecho que el tráfico sea aún más difícil de manejar.
Ante esta situación, se recomienda a los ciudadanos planificar sus trayectos con antelación y, cuando sea posible, optar por vías alternas para evitar los puntos de congestión más intensos.